Para ello se utiliza un agente humectante basado en sales de potasio, con bajo pH, especialmente recomendado para la extinción de fuegos generados por grasas y aceites. Es muy efectivo sobre la grasa, formando una capa superficial que extingue el incendio y evita la reignición.

La detección se realiza mediante un tubo lineal termo-sensible que actúa automáticamente al entrar en contacto con las llamas. La consecuencia es la inyección del agente extintor en los puntos críticos del equipamiento de la cocina a través de las boquillas de descarga de agente (distribuidas por sus propias tuberías).

Después de la descarga, es fácil retirar el agente extintor sin limpiadores químicos; tan sólo se precisa agua o vapor.

Estos sistemas de extinción son un mini sistema de extinción automático de pequeño ámbito. Se basa en el sistema de extinción FIRE-TEX y con tamos con las variedades FIRE-TEX-1, FIRE-TEX-2 y FIRE-TEX-CONFIGURABLE. La diferencia entre los tres sistemas radica en el tamaño de la cocina que queramos cubrir.

Para cualquier diseño de este tipo de extinciones, existen unas reglas de cálculo definidas en las fichas técnicas del equipo, donde se explican los requisitos mínimos de montaje e instalación, para que se acredite el cumplimiento de la normativa actual.